jueves, 19 de agosto de 2010

Ataques en el ciberespacio


Frente a la ciberguerra que se está dando entre China y el gigante Google, Jeff Jarvis pronuncia en su blog Buzz Machine una Carta de Derechos en la cual defiende la libertad de los ciudadanos de todo el mundo de navegar por Internet. Inspirado en la Declaración de Independencia del Ciberespacio redactada por John Perry Barlow y motivado por el accionar de Google como defensor universal de la interactividad global en la red, Jeff escribe nueve derechos del ciberespacio:

I. Derecho a conectarse
II. Derecho a hablar
III. Derecho a hablar en nuestro propio idioma
IV. Derecho a organizarse en asambleas
V. Derecho a actuar
VI. Derecho a controlar nuestra información
VII. Derecho a tener una identidad
VIII. Lo que es público es un bien público
IX. Internet debe ser construido y operado abiertamente

El objetivo de esta Carta de Derechos no es la de promulgar la creación de una Constitución o Código de Internet, sino  defender el principio de libertad del que hablaba Barlow. Libertad para regular las relaciones que rigen y regulan el ciberespacio, y libertad para todos los individuos de formar parte de estas.
Frente al conflicto cibernético entre Google y China, Jeff se mantiene a favor de la gran G, sosteniendo que sus motivos son desinteresados y a favor de la comunidad global. Por otro lado, hay quienes ponen en tela de juicio a la bondad de Google, y desconfían de sus acciones. Es difícil medir hasta qué punto el beneficio económico y el prestigio de esta gran empresa crecen en respuesta al conflicto contra el totalitarismo chino. Este país intenta luchar contra la expansión de Google en su territorio y defiende sus empresas nacionales; Google intenta establecer una democracia global Online.

La carta de Derechos supone un reconocimiento a la libertad del ciberespacio en el cual todos los individuos son iguales en cuanto a derechos. Acorde a esto, en el caso de China vs. Google se estaría dando una violación a este principio de libertad, ya que China está implementando medidas que obstaculizan el libre acceso Internet por parte de la ciudadanía. Por su parte el gobierno chino sostiene que son políticas nacionales para proteger sus productos y empresas. La divergencia entre esta ideología y la que divulga Google, es que la primera está basada en el poder, ataques y censuras; y la segunda se basa en acciones no gubernamentales que promueven la libertad y el deslindamiento de los gobiernos en temas cibernéticos. Estas acciones que posicionan a la gran G como embajadora de la ciber democracia global alimentan algunos intereses particulares, como lograr una expansión económica, conseguir mayores ingresos, reforzar su imagen y elevar su prestigio.